Muchas personas tienen por costumbre beber agua fría inmediatamente después de las comidas. Sin embargo, puede llegar a ser doloroso según indican muchos expertos.Aunque no está comprobado científicamente, se conoce que este hábito puede llegar a causar efectos negativos en nuestro organismo. Beber agua fría cambia el estado de los alimentos que hayamos ingerido previamente, lo cual dificulta las digestiones. Por ejemplo, los alimentos que son grasos se solidifican con el frío, con lo cual esto ralentiza su digestión y puede llegar a causar problemas de reflujo gástrico.
Además, el hecho de tomar agua fría implica un gasto de energía, y con lo cual una mayor sensación de calor. De hecho, algunos expertos recomiendan beber una taza de té caliente en los peores días de calor para estimular la sudoración, el mecanismo con el que cuenta el cuerpo para refrigerarse.
El consumo de agua fría durante las comidas también puede afectar a las personas con sensibilidad dental, migrañas o severos dolores de cabeza.
Tomar agua fría con las comidas también puede generar dolores de estómago e hinchazón ya que algunos alimentos se expanden al consumir agua, haciendo que el estómago se estire y cause dolor.
¿Cuál es la mejor manera de beber agua?
Nuestro estómago está diseñado para consumir alimentos a una temperatura similar a la de nuestro organismo. Así que ingerir alimentos demasiado fríos significa un trabajo extra para el proceso de digestión.
Lo mejor entonces sería consumir agua a temperatura ambiente en lugar de beberla a una temperatura demasiado fría para nuestro cuerpo.
¡Un muy feliz y saludable verano a todos!
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En los paises africanos, Egipto, Marruecos entre otros en momentos de mucho calor y siempre antes de las comidas, te sirven te azucarado con menta. Beber una cerveza u otro líquido frio es motivo de diarrea o alteración digestiva.